durante la disertación nicolás Casalánguida aborda la temática desde la lectura que hace el equipo que ataca de la defensa que se le plantea y realizar los bloqueos directos en transición para que las defensores no se establezcan y contrarresten las acciones del ataque.
Según sus palabras él busca la forma de sacar provecho de esa situación (el bloqueo directo) con un ataque que no difiera según la defensa planteada por el rival: se puede hacer lo mismo frente a una defensa zonal, combinada o hombre a hombre y en función de esto encontrar mayores oportunidades desde el pick and roll además del 2×2, siendo posible encontrar juego interior o aprovechar el miss match.
Hizo hincapié también en que las sesiones de entrenamiento contemplan tanto el ataque como la defensa de estás situaciones.
Menciona que hay que darle mucha importancia al pase y al buen pasador. El buen pasador es aquel que que “sabe percibir, tomar la decisión y realizar la ejecución” de la acción en el momento y el espacio adecuado (timming y spacing).
Siempre busca que el equipo sepa determinar contra que defensa se está jugando y cómo explotar eso y remarcó: “no importa tanto el dibujo de la acción sino que lo que más interesa es que el conjunto sepa como sacar provecho de eso”.
También reflexionó sobre que al finalizar la posesión, al cierre de un cuarto o al finalizar el partido los equipos buscan jugar con bloqueos directos por lo que considera que “es un tema que hay que tener muy desmenuzado” y que al comenzar la temporada los  jugadores deben saber “cómo jugamos contra este
estilo defensivo, donde nos ponemos, cual es el comportamiento contra esta defensa, cual es la ubicación
de los grandes contra esta defensa. Todo eso debe ser un conocimiento colectivo. Todos los deben saber.”
Utiliza la metodología de ir desde lo más simple a lo mas complejo, dejando por momentos que los jugadores descubran qué comportamiento deben ejecutar en función de las situaciones defensivas.